Bullrich logra que nombren a Gerardo Milman como ñoqui de lujo

Patricia Bullrich intenta acumular poder en el Senado y este viernes logró que Bartolomé Abdala designara como director de la Relación con las Provincias al exdiputado Gerardo Milman, en plena sesión por la sanción del presupuesto.
De este modo, la exministra burló el veto de Karina Milei contra el legislador acusado como ideólogo del atentado contra Cristina Kirchner, mientras desfilaban por su despacho desde Martín Menem hasta Diego Santilli y Carlos Guberman. Con el gobierno sumido en la negociación con bloques aliados y opositores por la ley de leyes, Bullrich consiguió que Abdala sacara el nombramiento de Milman en una función por la que cobrará alrededor de 3 millones de pesos.
A todo esto, un senador le dijo a LPO que se había topado con Milman en varias ocasiones durante los últimos días. "Bullrich lo tenía escondido en la Oficina 513 del edificio de La Caja", comentó en alusión a uno de los anexos con despachos del Senado.
El trámite se concretó a través de un memo registrado bajo el número 89869/2025 y fue ingresado por mesa de entradas con el usuario de Abdala. "Todo pedido de Bullrich a Abdala es venenoso", deslizó un libertario.
La designación de Milman parecía haber tomado por sorpresa al entorno de la Vicepresidenta, escogida por Bullrich como antagonista para congraciarse con la Casa Rosada.
En ese contexto, Bullrich metió a uno de sus alfiles desde que condujo la cartera de Seguridad durante el mandato de Mauricio Macri en un lugar estratégico de la Cámara Alta.
Milman es un hombre resistido por la oposición peronista, que apuntó contra el exdiputado como uno de los autores intelectuales del atentado contra Cristina el 1° de septiembre de 2022. Durante el último tramo de su mandato, el exlegislador había permanecido en silencio durante las sesiones porque esas denuncias inhibieron su tendencia a la confrontación en los debates.
Solo levantó apenas el perfil antes del cierre de listas, pero Bullrich no pudo garantizarle un lugar para renovar su mandato por el veto de Karina. Tampoco pudo luego meterlo en Migraciones. Pero la ex ministra no iba a parar hasta pagarle con un cargo.